Las protestas en Colombia se suman a un continente cada vez más convulsionado
La represión a las protestas en Colombia ya suma un saldo de tres muertos, en el marco de una serie de movilizaciones que empezaron tras el paro general en todo el país y que se añaden a la convulsión en varios sitios de América Latina.
Al gran caudal de manifestantes que se lanzaron a las calles en diferentes ciudades durante la tarde del jueves, se añadieron estruendosos cacerolazos por la noche, y todavía se sentían las repercusiones de una jornada histórica en el país cafetero, pues llevaba varios años sin actividad de este estilo.
La crisis se desató en respuesta a dos problemáticas centrales que tienen al gobierno de Iván Duque en el centro de la escena: en principio, un ajuste económico contundente que repercutió en el seno de la sociedad, especialmente en los sectores más postergados; mientras que también condiciona el ambiente las dificultades para allanar el camino a una respuesta para la paz, dado que se estancó el diálogo que había habilitado el Ejecutivo con grupos guerilleros, generando incertidumbre total.
Expectativa
Frente a ese panorama, se espera que se recrudezca el conflicto y se sumen más alternativas a las protestas para intentar encontrar una respuesta de parte de los funcionarios.
