La canasta básica ya aumentó más del doble que los salarios durante la era Macri
La inflación no frena su marcha y la evidencia más palpable está en la relación entre los precios de la canasta básica y los salarios, que se despegaron en gran forma, uno de otro, en los más de tres años que lleva como presidente Mauricio Macri, pauta que profundizó el registro de la pobreza.
En ese sentido, mientras alimentos como el aceite treparon hasta un 600 por ciento con Cambiemos en el Ejecutivo, los sueldos del sector registrado tuvieron un alza del 130 por ciento; en tanto que las jubilaciones también quedaron muy atrás, ya que se incrementaron 149 por ciento.
El mayor drama del bolsillo del trabajador argentino se sufrió en 2018 con la devaluación compleja, y este 2019 arrancó igual de dificultoso, más allá que se percibe cierto freno en la disparada del valor del dolar.
Frente a ese panorama, los alimentos básicos, en promedio, subieron desde diciembre de 2015 a la fecha un 224,6 por ciento, mientras que los salarios registrados del sector privado crecieron sólo un 130 por ciento. Es decir, la mitad de lo que se encarecieron los productos de la canasta básica.
En rojo
De acuerdo a los datos del Ministerio de Trabajo, el índice SIPA registró para febrero de 2016 un salario promedio de los trabajadores registrados del sector privado de $12877, en bruto; mientras que en febrero de 2019, último dato oficial disponible, es de $29.617, siempre en bruto, sin los descuentos laborales. Es decir, un alza del 129%.
En el caso de las jubilaciones, el gobierno de Cristina Kirchner dejó un haber de $4299 y al día de hoy los abuelos cobran $10.410, un 149% más. Pero si se posa la vista en los servicios como la luz, las alzas son exorbitantes: la energía aumentó un 3500 por ciento, mientras que el gas trepó entre un 1000 por ciento y un 4500 por ciento, según los diferentes lugares de residencia, siempre en Buenos Aires.